Thursday, February 28

Hoerikwaggo

Amanecí con la increíble vista de las montañas desde mi ventana. Devil's Peak (izquierda) cubierta de nubes; Table Mountain o Hoerikwaggo (montaña del mar, como la llamaban los Khoekhoen) perfectamente crisp clear; patos y focas nadando alrededor del barco. Todo tan tranquilo! Me quedé en Lido, escribiendo y disfrutando la vista. Estamos en el "Victoria and Alfred Waterfront", frente al elegante Table Bay Hotel (donde la gente paga unos $1,000 la noche por una vista equivalente a la nuestra) y el Victoria Wharf Mall con 300 tiendas, 30 restaurantes y 20 cines. Además de muelles y hoteles, hay oficinas, museos, un acuario, mercados, calles peatonales, cantidad de bares, restaurantes, y parqueos. En 2006, vendieron el Waterfront al consorcio L&R, un grupo hotelero y de bienes raíces, por 7 billones de rands (US$1 billón). L&R está desarrollando más servicios en el área, para estar listos cuando lleguen las hordas de aficionados al fut para la copa mundial de 2010. A los estudiantes les fascinó esta área, segura, agradable, hay de todo y el tipo de cambio muy favorable: unos 7 rand por US$1, parecido a Guate. Los precios también están parecidos a los de Guatemala: el mejor restaurante del Waterfront cobra 135 rand por su plato más caro. Una camisa de tela típica, 60-100 rand. La revista Time, 30 rand. Un CD de música de moda, 120 rand. También como en Guatemala: aquí tocan marimba! Este conjunto alegraba la calle con tres marimbas (sencillas, con caja de resonancia de plywood), tambor, saxo, pandereta, y mucho espíritu! Aprovechando la variedad de librerías, compré revistas (las de rigor, más South African Business Magazine, CIO Africa, European Business...) y algunos libros de viaje que nos van a servir (Istanbul, Barcelona...) para la biblioteca. Y en el súper, varias libras de dulces para las "atenciones a clientes", así como de una vez algunas provisiones para la travesía de aquí a Barcelona: queso, toronjas, galletas, nueces, y dos libras de la versión sudafricana del biscotti: aquí les llaman "rusks", son más cortos y cuadrados, y vienen en sabores como semillas de amapola, limón, y mi sabor favorito: buttermilk.

Le dí la vuelta a la ciudad en el bus rojo desos de hop on, hop off. Otra similitud con Guate: razor blade sobre paredes altas, en todos lados. Me bajé en la estación del funicular para subir Table Mountain. El piso de la góndola va dando vueltas, así que todos los pasajeros tienen una vista de 360 grados. La montaña es de granito y calculan que tiene más de 250 millones de años de "edad". Arriba, a mil y pico empinados metros sobre el nivel del mar, caminé por la plana montaña disfrutando de una vista espectacular para todos lados. Sin barandas, sin guardias, con mucho cuidado y juicio. Dicen que se vé desde 150 km mar adentro! En la foto, arriba a la izquierda apenas se nota Robben Island, la isla prisión, y abajo, parte de la ciudad, con el Waterfront. El diagrama (derecha) es de una placa de metal atornillada en el mirador que da al sur. Muestra cómo el Índico y el Atlántico chocan frente al Cabo, aunque como se vé, el punto más sureño es Cabo Agulhas. La montaña es parte de la región llamada Cape Floral, que fue declarada World Heritage Site de UNESCO por su riqueza vegetal: en 0.05% de la superficie terrestre, esta región contiene 3% de las especies de plantas. Y el 70% de esas especies (unas 6,700) son endémicas y no se encuentran en otra parte del mundo. También hay animales únicos, como los dassies (que se esconden de día, me parece), esta lagartija acorazada de aspecto prehistórico, y los sudafricanos homo sapiens escalamontes asoleados con sus cachorros en carruajitos. Un highlight de mi caminata por la cima fue pararme en la orilla, a oír caer las piedras de los acantilados. Acepto que la subida en funicular fue un tanto chanchuyo... algunos del barco subieron a pie, eso sí, en grupos y/o con guías, dejaré eso pendiente para "otro día" ;-)

AP