Friday, April 4

Al Ojo

La cisterna (tanque de agua) subterránea de Yerebatan fue construida en el siglo VI. Mide 138m por 65m y 8m de alto. Su capacidad es de 80,000 metros cúbicos. Pero ya no se usa para almacenar agua, sino como atracción turística. Desde la calle, lo único que se vé es una casita de ladrillo, donde uno paga la entrada (10 liras, , baja por unas gradas y de inmediato, siente una corriente de aire frio y húmedo y se encuentra en un gran espacio techado, con 12 filas de 28 columnas, dos de las cuales tienen como base la cabeza de Medusa, y otra tallada de arriba a abajo con ojos o plumas de pavo real y otras más, reforzadas sin duda para sostener construcciones modernas allá arriba; mientras peces nadan en un metro de agua, y goteras forman charcos sobre las tarimas que hacen posible ir de un lado al otro, en la semioscuridad roja, suena música clásica (Beethoven?) y titilan las veladoras que adornan el café de una esquina. (Leo que hay otras cisternas en Istanbul, que unas son museos, otras tiendas, restaurantes, incluso garages!) Lástima el menú no era como para almorzar, así que salimos y escogimos, así al ojo, un restaurante de mezes para turistas, Bodrum-- que resultó rico.

De allí, a visitar Hagia Sophia. Qué puedo decir... no dan los ojos para percibir el gran espacio, la cúpula es tan alta que es imposible de fotografiar, y a pesar de que hay un andamio que llega al techo, la sensación de inmensidad achicopala. Más objetivamente, es tan alta que el Gran Jaguar cabría de sobra; calculo que incluso cabe una torre del Géminis con sus 18 pisos en esta cúpula de 180+ pies de alto. Hagia Sophia fue construida por Justiniano hace 1,500+ años y fue el centro de la iglesia ortodoxa hasta la caída de la ciudad en 1453, cuando fue convertida en mezquita. Pero para entonces ya había perdido mucha de su riqueza, en 1204, cuando los venecianos de la cuarta cruzada tomaron la ciudad. Mary Lee Settle describe así lo que vio en la iglesia de San Marco, en Venecia: The treasure room was full of gold objects from Hagia Sophia that had escaped being melted down by Napoleon. The icon of the Madonna Nicopeia, the Bearer of Victory, that was carried before the Byzantine army, and that had so failed them when the Fourth Crusade took the city, stood in a chapel by the high altar. The Byzantine crucifix with its twisted body of an agonized Christ that they say bled when one of the crusading marauders stabbed it with his sword, was two feet from me at mass, and I could have touched it. (Turkish Reflections, p.45)

Pasamos al mercado de especies a conseguir turkish delights y té de manzana para llevar a la UFM :-) Escogimos la tienda echando ojo y verificando que había muchos locales comprando! Y nueces y baklava y un botecito de azafrán iraní (1 gramo = 8 liras) y fotos de pescados y videos de patitas de cerdo y la cola en la tienda de café recién tostado. El mercado no reta al olfato, ni siquiera las secciones húmedas, al contrario, está bien limpio todo y huele rico. Cenamos en el Four Seasons, impecable. Volví a pedir el mismo vino de anoche, porque estaba rico. Y ahora leo en la Sotheby's Wine Encyclopedia que Tom Stevenson critica fuertemente los vinos turcos: "generally flabby, too alcohol heavy, oversulfured, and all too often oxidized". De los más conocidos (Trakya, Kirmisi, Duo Hosbag y Buzbag) dice que "despite local fame, these wines should be avoided". Y que uno de los dos buenos son los Kav de Villa Doluca, vinería fundada en 1926 por Nihat Kutman. Pues cabal un KAV Öküzgözü fue lo que tomamos :-) Qué buen ojo - ojo de buey, para ser exactos, pues Öküzgözü significa ojo de buey!